En casi todos los pueblos del mundo los grandes árboles son puntos de encuentro, ocurre casi naturalmente, porque acogen de muchas maneras.

Bajo los árboles un@ siente que se tranquiliza, que descansa..que se

conecta otra vez con la vida que fluye, un refugio donde escapar de las

prisas y entrar en su tiempo, siempre sereno. Por eso un@ siente

que se cura, cuando pasa un rato bajo un árbol…se relaja..se vuelve simple.

También su sombra te refugia del calor, de la lluvia, resguarda los juegos

de los niños; son puntos de referencia dentro de los pueblos, a veces

lugares de admiración bajo los que la gente habla, hace negocios,

enseña, aprende, celebra, se inspira bajo los árboles…

 

Por eso elegí ese nombre para mi tienda, quería que fuese como un árbol dentro de un pueblo, un punto de encuentro en todos estos sentidos..